Las energías renovables están teniendo un impacto muy significativo en la economía española en un momento en el que la transición energética ha adquirido gran relevancia a nivel nacional y europeo. Las perspectivas de este sector son, además, muy positivas.

Tendencias de las energías renovables

El impacto de las energías renovables en España

Según el estudio realizado por la Asociación de Empresas de Energías Renovables, en 2018 el sector creció un 10,7% en términos reales. Las energías renovables han marcado un récord de exportaciones y han supuesto un 0,87% del PIB nacional, encadenando así cuatro años de crecimiento. Asimismo, las energías renovables aumentaron su participación en el consumo de energía primaria 1,7% respecto a 2017 y representan ya el 15,1% de la energía consumida en España.

También ha crecido el empleo en el sector renovable, un 3,3% respecto al año anterior. Y, en términos medioambientales, se ha generado un ahorro significativo en importaciones energéticas y en derechos de emisión.

En 2018 las empresas renovables han contribuido de manera muy relevante a la inversión nacional en I+D+i (un 3,07% de su contribución al PIB), casi el triple de la media de la economía española (1,2%) y muy por encima de la media de la Unión Europea (2,07%).

Perspectivas de futuro del sector

Resulta claro que el sector de las energías renovables se encuentra en un momento de auge. En línea con esta tendencia de crecimiento, el Gobierno se ha fijado unos objetivos ambiciosos en materia de energías renovables en el Plan Nacional Integrado de Energía y Clima 2021-2030 que ha enviado a Bruselas recientemente:

  • Alcanzar un 42% de consumo de energías renovables frente a otras fuentes (desde el 15,1% actual).
  • Reducir el déficit energético hasta el 59% (frente al 74% actual).
  • Alcanzar el 74% de las fuentes de generación eléctrica en 2030 (frente al 38-40% actual).

El referido Plan contempla que la mayor parte de las inversiones provengan del sector privado. Para ello, el sector debe ser capaz de movilizar los recursos necesarios para afrontar una inversión y un crecimiento de tal magnitud.

Personalidades importantes en el sector energético son optimistas con respecto a la posibilidad de alcanzar estos objetivos para el 2030. España cuenta con empresas experimentadas en la promoción y desarrollo de plantas renovables, aquí y en el extranjero, así como con magníficos recursos renovables (solares y eólicos, fundamentalmente).

Ahora bien, para hacer frente a los objetivos fijados en el plan 2021-2030, España debe contar con un marco regulatorio que ofrezca suficiente seguridad y estabilidad e incentivos a inversores, promotores y desarrolladores. Sería conveniente resolver la presente situación de inestabilidad política y adoptar un marco normativo de consenso, libre de vaivenes políticos.

El sector debe estar preparado para promover y canalizar la inversión que haga posible alcanzar los objetivos de crecimiento de las energías renovables para 2030, para lo va a resultar esencial implementar los cambios tecnológicos que contribuyan a la optimización de la eficiencia energética y a la preservación del medioambiente.

Pablo Salinas. Asociado en el Área de Infraestructuras, Energía, Construcción y Major Projects.